viernes, 9 de abril de 2010

Sueños...



Te he soñado,
te he pensado,
te he hablado... en la distancia.
Te he querido sin saber tu nombre. Te he buscado en cada lugar,
y cuando te he encontrado,
mis ojos han brillado,
y mi alma ha sonreído.

El sueño es este: que finalmente seremos felices cuando alcancemos nuestras metas, encontrar a esa persona, terminar nuestra carrera; ese es el sueño. Entonces llegamos a él.

Y, si somos humanos, inmediatamente empezamos a soñar de nuevo, porque si este es el sueño... entonces nos gustaría despertarnos. Ahora, por favor.

En algún punto, quizá debamos aceptar que el sueño se ha convertido en pesadilla. Nos repetimos que la realidad es mejor, nos convencemos de que es mejor no soñar jamás...

...pero los más fuertes de nosotros, los más determinados y valientes, nos aferramos a nuestro sueño. O nos encontramos a nosotros mismos enfrentados a un nuevo sueño que nunca habíamos considerado. Nos despertamos para encontrarnos a nosotros mismos, contra todo pronóstico, llenos de esperanza. Y, si tenemos suerte, nos damos cuenta que frente a todo, frente a la vida, el verdadero sueño es ser capaz de soñar...

1 comentario: